Sé que el título suena a «magia potagia», pero es que realmente la mayoría de las cosas que nos limitan o nos empoderan, esas que nos hacen avanzar en el camino, que nos bloquean, que nos sabotean, que hacen que actuemos o que alcancemos nuestros deseos…, son al igual que la magia, invisibles a los ojos.
Porqué las creencias no huelen, los miedos no se ven, las emociones que tanto nos elevan o hunden, no las podemos tocar. La seguridad no hay dónde ir a comprarla, la confianza no tiene color… Algunas de las cosas más importantes y necesarias de la vida, esas que nos mueven, que nos frenan o que nos hacen volar, son inmateriales e incorpóreas. Pero en cambio contienen una energía que sí es perceptible, ya que las intuimos y las sentimos.
Es por eso, que detrás de las personas que consiguen aquello que desean, no solo hay lucha, constancia, trabajo, conocimiento…,toda esta parte visible está muy clara, si no que también hay todo un mundo interno mucho más potente que aquello que se ve, un mundo invisible que consta de:
- «Creer en ti y en tu potencial», «Creer en que aquello que quieres es posible», «Tener confianza en el proceso que estás viviendo», «Seguridad, de que todo lo irás resolviendo» y una buena dosis de «Valor, para ir trabajando los miedos que se van presentando».
Y aquí te dejo el secreto:
«Todo lo creado, siempre se ha creado dos veces»
(una en la mente y la otra en el plano material)
Empezando por todos los objetos que ahora mismo te rodean, el Internet que utilizas para leer este artículo o la ropa que llevas puesta…, absolutamente todo se ha creado primero en la mente y después en la realidad física. Y de la misma forma tiene que pasar con todo eso que deseas para ti.
Es por eso que si no lo construyes primero en la mente, será muy difícil que lo construyas en tu realidad. Me refiero al hecho, de que si no crees que es posible que alguien te quiera, no encontrarás alguien que te quiera; si no crees que puedes cambiar algo que te limita, no cambiaras; si no crees que puedes mejorar la relación con tus hijos, no mejorará; si no crees que te merezcas tener un trabajo que te guste y te realice, no lo encontrarás; si no crees que seas capaz de tener, recibir, de dar lo mejor de ti mismo/a, de conseguir cosas buenas y buenas relaciones…así será…ya que CREER es la primera dimensión en la cual construimos, para que después podamos construir en el plano físico.
Por eso, toda terapia trabaja las creencias limitantes, porqué es el primer sitio, el primer espacio, donde conseguimos o no todo eso que deseamos.
¿Eso significa que solo hace falta pensar una cosa para tenerla? No, significa que el primer paso, un paso grande, potente e importante para conseguir lo que sea, es primero crearlo en la mente.
Puedes estar toda la vida estudiando y trabajando para una cosa, que si en tu interior no la crees posible para ti, actuarás de tal forma inconsciente que no lo harás posible. A la inversa, seguro que sabes o has visto casos en que sin demasiado esfuerzo, personas que están convencidas de que conseguirán tal o cual, lo consiguen. Y la «magia potagia» está en que al creer, todos los pasos inconscientes y conscientes van hacia el mismo camino adecuado.
¡No solo eso!, sino que el mismo hecho de creer en ti, de creer que te lo mereces y que lo puedes conseguir, ya lleva de recargo mucha seguridad (¿que da más seguridad que tener claro a por lo que vas y saber que es posible para ti?) y confianza (sé que es posible y sé que si camino hacia Roma, no hay más resultado que llegar a Roma).
No te olvides de crear en tu mente todo aquello que deseas. Visualiza, imagina, ¿cómo te sentirás cuando lo consigas? ¡Si otros lo han alcanzado, tú también puedes!
Todo sueño, ilusión o deseo, empieza con los ojos cerrados.
Gemma Pallàs.
Coaching personal.